Consejo inicial para viajeros sin fe

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Hola soy un personaje ficticio y me llamo Drama. Mi principal función aquí es despersonalizar al autor y brindar así un mensaje con esperanzas a dichos viajeros, desde un punto de vista ajeno y anónimo.
Aquí va.

Estoy desarrollando una idea, que servirá en un futuro, pero es exclusivamente para gente libre de ser. Me es necesario explicarlo a través de un recurso literario muy básico, el del yo y el otro yo. Se que puede resultar molesto, pero es su deber como lector pasajero, hágase cargo de ese deber, lea y comprenda mi real necesidad innata de exponer la situación.

La cuestión es la contradicción, en su fase más pura. La contradicción ordinaria muy simple de tras estar un tiempo en espera; la concreción final de la construcción del sueño se realiza. Mas específicamente a la sensación inminente pero inverosímil de esta realidad. Esto ciertamente me suele quitar el sueño.

Ahora expongo a viva voz

Aquel individuo o persona, el cual su dignidad no hace grandes esfuerzos para agradar a nadie, de nombre Drama, es un artista en su errónea forma de vivir. Por otro lado quisiera no tener que llamarme yo así. Su parloteo intrascendentemente vacío de contenido, sin duda no se compara en lo más mínimo con mi poesía costumbrista. Basta cantidad de poesía tirada, pero rica al fin, disuelta en la basura por miles de microorganismos. Ese fue mi legado como artista, ahora soy solo un ser prodigioso, que mira con adaptabilidad a los que no conoce. Al mirarlo de lejos, pienso, ¿el que tiene? Puedo decir y pensar en un deseo de rebeldía, o acaso su seducción peligrosa con la muerte, el vertiginoso descenso a las tempestades, el ocultismo de un alma de piedra, en este momentos son las cualidades que resalto en su esencia, solo eso.

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Reafirmando mi postura anterior, remarco que yo, soy la mejor edición de mi yo.

Todo lo redactado anteriormente, es ante mis atributos una ínfima cosa, pequeña, opacadas por cierto ante mi colosal valía.

Yo Drama, casi dios me desvivo con placer, cuando me siento a contemplar fríamente la completa y llana nada. Siempre lo digo, no es el paisaje lo que importa, sino adonde se mire. Tan solo con una milésima de segundo, con una fracción para mi es suficiente para introducirme en un viaje psicotrópico por las mareas de la introspección.

Así nos dividimos, dos paralelas opuestas en un solo eje, resultan un remolino de identidades y desencuentros multipersonales.

Aunque sienta aun que yo soy mi mejor parte, reconozco a duras penas que existe un instinto, en común y finalmente en uno. El instinto de la evolución. 

Y la evolución es para mí una fuerza que absorbe recuerdos a través de la experimentación, transformada en información concreta sobre nuestro futuro y de generaciones, alojadas como pasajeros eternos dentro de nuestra historia genética. Para tan solo volvernos uno solo, y solo eso.

Tratare de unificar mis partes para completar una sola figura perfecta. Recopilare información, me fusionare con el sentir de cada momento. Y así la experiencia reinara en su apogeo espiritual, ya que, pienso y digo nuevamente tallándolo sobre el umbral: La experiencia con los años no existe o termina por envejecer, sino se emplea la capacidad de experiencia en los mismos.

...asi que viajeros, cuanto mas lejos vallan, y por favor procuren hacerlo, mayor sera su capacidad evolutiva

Fecha de partida: 14 de Enero

Los límites de lo absolutamente posible no delinean para nada un techo ni una frontera para nuestro grupo. La organización desmedida de este viaje que preparamos, nos posiciona como grandes planificadores, pero todo esto aquel día desaparecerá, volviéndose intrascendente ante el momento en el que el porvenir se vuelva un gran cubo gigante que antes nuestras narices dirá sin pronunciar: presente y nada mas. De una vez por todas encriptara el futuro para entregarlo en nuestras manos. E iremos en busca del día a día, en busca del existir, y finalmente encontrar aun nuevas formas de serle fiel al arte.